Cádiz, provincia (Andalucía, España)

1. Prov. española de Andalucía, que limita al N con la de Sevilla, al E con la de Málaga y el Mar Mediterráneo, al S con el Estrecho de Gibraltar y al O con el Atlántico y el curso bajo del Guadalquivir, que la separa de Huelva. Es una de las provincias andaluzas menores (7323 km2), pero la segunda en población absoluta. Su nivel de vida resulta elevado, dentro de la tónica general andaluza.
   
   • Geografía De Cádiz: En el litoral gaditano, que en su parte occidental forma la hermosa bahía de Cádiz, se enlazan el Mediterráneo y el Atlántico y se enfrentan Europa y África. Morfológicamente Cádiz está constituida por dos unidades diferentes: al N y al O se extiende el final de la llanura bética, cuyas formaciones ... Para seguir leyendo ver: Geografía De Cádiz
   
   
   Vida humana. La ocupación de la provincia es muy antigua. Cádiz constituyó el punto de penetración de los pueblos mediterráneos en la depresión bética y formó parte del legendario Tartessos. Integrante después de la Bética romana, sus ciudades, de origen fenicio, griego o púnico, gozaron de enorme prestigio en la Roma imperial: en Gades vivieron los Balbo y allí nacieron Columela y Pomponio Mela. Ocupada tempranamente por los musulmanes que a orillas del Guadalete o de la Janda vencieron a los visigodos, desempeñó un importante papel en la Reconquista y, después, en el descubrimiento y la colonización de América, que beneficiaron directamente a la economía gaditana. Desde entonces, su situación la ha convertido en adelantada hispánica hacia el Atlántico y el África Menor; todavía hoy Ceuta le está ligada administrativamente. El hombre, al adaptarse al medio físico, ha creado una serie de unidades regionales típicas, como son la pentápolis gaditana, la «frontera» de Arcos y Medina-Sidonia, la Sierra y el Campo de Gibraltar.
   
   La compleja escotadura de la bahía de Cádiz constituye el núcleo vital de la provincia. Sus cinco poblaciones costeras, a las que se podría agregar Jerez, forman un tercio al menos de los habitantes y concentran las principales actividades económicas. La base económica es la pesca: peces y crustáceos de gran calidad, que con la industria conservera ocupa a más miles de personas; el tráfico marítimo, centrado en el puerto de Cádiz; las salinas, muy abundantes al mediodía de San Fernando; las industrias navales, con tres grandes astilleros y dos factorías de armamento de navios; y la construcción aeronáutica. Las bellas playas de la región atraen, durante los meses estivales, una masa turística importante, que procede sobre todo del valle del Guadalquivir. La creación de la gran base aeronaval hispanonorte-americana de Rota constituye otro elemento de desarrollo económico. Los núcleos urbanos son, además de esta última ciudad, hoy totalmente transformada: Puerto de Santa María, que prolonga las actividades vinícolas de Jerez, en la desembocadura del Guadalete, cuyos aluviones han inutilizado su antiguo varadero; Puerto Real, verdadero arrabal gaditano, con los astilleros de La Carraca y Matagorda; San Fernando, capital del Departamento Naval de Cádiz, sede del Panteón de Marinos Ilustres y del prestigioso Observatorio Astronómico de San Fernando. La costa, baja, arenosa y cortada por esteros y canales (los «caños»), está respaldada por una fértil campiña que preludia la riquísima Jerez de la Frontera. El conjunto urbano es presidido por Cádiz, la capital de la provincia.
   
   Al E y al S se alzan las fértiles y onduladas campiñas de Jerez, Arcos, Medina-Sidonia y Vejer, la antigua «frontera» del Reino de Granada, cuajada de viejas fortalezas que coronan legendarias ciudades amuralladas. Limitada al N por el Gibalbín, que la separa de la depresión bética, y al S por la Silla del Papa, a orillas del Atlántico, asciende suavemente hacia la Sierra, que la rodea por oriente, en una serie de escalones atravesados por los ríos Guadalete-Majaceite y Barbate, origen de dos amplias depresiones: la de Arcos al N y la de la Janda al S, que separa la masa compacta de la Sierra del Algibe (1092 m). Región agropecuaria, de clima casi oceánico, sus fértiles suelos sostienen ricos cultivos de cereales, olivos y vid, con grandes dehesas de vacunos y caballos muy apreciados. Aparte Jerez de la Frontera, en el límite entre esta región, el valle del Guadalquivir y la bahía de Cádiz, se encuentran numerosas ciudades, enriscadas y coronadas por poderosas fortalezas que recuerdan el pasado. Al N Arcos de la Frontera es una de las más bellas poblaciones andaluzas, con su cohorte de pequeños núcleos, como Bornos, Villamartín y Algar; en el centro, Medina-Sidonia y Alcalá de la Frontera; en la costa o muy cerca de ella, Chiclana y Vejer de la Frontera, duplicada recientemente por su arrabal de Barbate de Franco, importante puerto pesquero.
   
   Las sierras de Algodonales, Grazalema y Libar forman el límite oriental de la provincia; país forestal y ganadero, cuenta con pequeñas poblaciones, como Grazalema, con su ganadería y tejidos, Olvera y Ubrique, sede esta última de una importante artesanía del cuero.
   
   El conjunto serrano rodea por occidente el Campo de Gibraltar, que la Serranía de Ronda limita por el este. Amplia depresión de fondo ondulado, que ha sido rellenado por los aluviones del Guadiaro, no es solamente una región natural, aunque tiene gran personalidad debido a su función militar: glacis del Peñón de Gibraltar. Las abundantes lluvias recogidas por las sierras periféricas hacen de ella una de las comarcas más húmedas de España y explican su abundante ganadería vacuna y porcina, alimentada esta última por una espesa masa forestal en la que el alcornoque desempeña un papel esencial. Sin embargo, la región, vieja frontera cristiana antes y campo militar frente a Gibraltar ahora, está poco habitada; la población aparece concentrada en pequeñas aldeas, poco numerosas, dispuestas al pie de las sierras: Jimena de la Frontera, Castellar de la Frontera y Los Barrios. Más importancia tiene el grupo urbano existente a orillas de la Bahía de Algeciras; aparte Gibraltar, en poder de Inglaterra desde 1704, la misma Algeciras, en su orilla occidental, es un viejo asentamiento griego, romano y árabe, término de los ferrocarriles españoles frente a África y cabeza de la navegación a través del Estrecho; es Algeciras origen de una poderosa actividad portuaria de pasajeros españoles y extranjeros y el segundo núcleo pesquero de la provincia. Pero últimamente Algeciras ha visto surgir una rival peligrosa en La Línea, muy favorecida por la demanda laboral del Peñón, aunque algo adormecida; en cambio, la vieja San Roque, que acogió a los españoles de Gibraltar tras la ocupación inglesa, ha quedado definitivamente rezagada.
   
   La población total de la provincia era a comienzos del siglo XX de 452659 h, que ascendieron a 547827 en 1920, a 600440 en 1940, para rebasar la cifra de 700000 en el censo oficial de 1950 y aproximarse mucho a los 830000 en 1959, lo que demuestra su rápido índice de crecimiento. Actualmente cuenta con 1 240 175 hab. (2014).
   
   
   Vida económica. La agricultura es la base de la economía gaditana, provincia que dispone de suelos fértiles y sistemas adelantados, pero que padece un excesivo latifundismo. La vid y el olivo son sus cultivos característicos, con caldos de gran calidad y magníficas aceitunas y aceites. Cultiva además los cereales, leguminosas (habas y garbanzos sobre todo), hortalizas, patatas y frutas: naranjas, limones y almendras, principalmente, destacan por su gran calidad las naranjas de Tarifa y San José del Valle. Últimamente se ha extendido el cultivo del algodón y en las partes elevadas de los montes crecen alcornoques, pinos y otras especies arbóreas, que dan maderas de construcción y de carboneo. En sus dehesas, de pastos ricos y abundantes, es muy numerosa la ganadería. Sus costas obtienen un gran rendimiento de peces y crustáceos, además de la sal de sus extensas salinas (San Fernando y Puerto Real). La sal, principal producto mineral, se obtiene por evaporación de las aguas marinas en San Fernando, Chiclana, Puerto Santa María y Puerto Real.
   
   La gran riqueza pesquera ha originado una importante industria conservera y de fabricación de efectos navales, pero, además, la vocación marinera ha concentrado en esta provincia una buena parte de la construcción naval española. Maquinaria, productos alimenticios, tonelería, sombrerería y mantelería, salazón, vidrio y cristal, aparatos eléctricos, curtidos, cementos, tabaco, tejidos de algodón y sobre todo sus famosos vinos y licores son otros tantos renglones de la industria gaditana.
   
   Los puertos de Cádiz, Algeciras, Sanlúcar y San Fernando, realizan un activo comercio y se relacionan con los puertos africanos, además de ser, en muchos casos, puntos de escala en las grandes rutas de navegación por el Atlántico y Mediterráneo. Sus principales importaciones son carbones, maderas, minerales, cristal, aperos de labranza, corcho y curtidos, y exporta sobre todo plomo argentífero del interior, pescado, sal, vinos, aceites y frutas.
   
   Atraviesan la provincia el ferrocarril y carretera general de Andalucía, con numerosas ramificaciones, que hacen que esté bien dotada de comunicaciones.

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