Artículo enciclopédico: historia de la bala (proyectil)
Historia de la bala (proyectil)
La historia de la bala o proyectil es un relato fascinante que abarca la evolución de estos elementos desde su forma esférica y fundida hasta los diseños más avanzados del siglo XIX.
La invención de la pólvora sin humo marcó un hito, permitiendo la creación de balas alargadas que mejoraron la precisión y eficacia en el uso de rifles.
Innovaciones como el proyectil cilindro-cónico de Henri-Gustave Delvigne y las soluciones propuestas por W.
Greener transformaron la balística, resolviendo problemas técnicos que antes limitaban el rendimiento de las armas.
historia de la bala (proyectil)
¿Preguntas sobre el significado de esta palabra?: respondemos aquí
[ Imágenes relacionadas a "historia de la bala (proyectil)" ]
Esta imagen puedes emplearla con fines didácticos en la escuela, institución educativa o proyectos web.
La invención de la pólvora sin humo marcó un hito, permitiendo la creación de balas alargadas que mejoraron la precisión y eficacia en el uso de rifles.
Innovaciones como el proyectil cilindro-cónico de Henri-Gustave Delvigne y las soluciones propuestas por W.
Greener transformaron la balística, resolviendo problemas técnicos que antes limitaban el rendimiento de las armas.
- Hasta mediados del siglo xix las balas eran esféricas y fundidas en moldes. Tras la invención de la pólvora sin humo a finales del siglo xix, todas las balas de los rifles fueron alargadas. Muchos inventores han pretendido ser los primeros en prever la acción de dilatación o expansión de la bala; a este respecto cabe señalar que el Gobierno británico concedió en 1857 una recompensa de 5000 dólares al fabricante de armas W. Greener por haber dado solución práctica a este difícil problema en 1836. En 1841 un oficial francés, Henri-Gustave Delvigne, inventó el primer proyectil alargado de forma cilindro-cónica con base hueca, que se expandía por la explosión de la carga haciendo que el plomo se ajustase al rayado del ánima de la pieza. Así, la gran dificultad de las piezas de avancarga, con una bala de un diámetro muy aproximado al del tubo de la pieza, desapareció por completo. En 1847, el capitán Claude Étienne Minié facilitaba la dilatación de la base por medio de una cápsula de hierro que en forma de taco se colocaba en el hueco de la misma y se introducía en él por efecto de la combustión de la pólvora. Las balas minié fueron pronto adoptadas en casi todos los ejércitos. Algunas balas alargadas presentaban unas acanaladuras o estrías de bordes agudos, colocadas en forma de anillos en el exterior de la base cilindrica a fin de contribuir a mantener la bala en su trayectoria.
Al fabricarse los fusiles y mosquetones de cañón corto a últimos del siglo xix para aprovechar la ventaja que proporcionaba el empleo de la pólvora sin humo, el diámetro de la bala se redujo considerablemente. Aun cuando también disminuyó su peso, hubo de procurarse que no fuese tan ligera que perdiese eficacia. Se construyó, pues, de tal forma que su longitud con relación a su diámetro fuera mayor que la de las balas empleadas hasta entonces. Es esencial para la precisión en la dirección de un proyectil alargado que su punta se proyecte siempre hacia adelante. Esto se consigue con el movimiento de rotación proporcionado por el rayado del ánima, que mantiene al proyectil en esta posición durante su trayectoria. Cuanta más longitud tenga un proyectil con relación a su diámetro, tanto mayor será el movimiento de rotación necesario para conservarlo en esa posición. Esta es la razón por la cuál el rayado de las armas de cañón corto presenta mayor inclinación que el de las de cañón largo. El rayado da una vuelta completa en el espacio aproximado de 20 cm (v. Fusil). Pero una bala de un metal tan blando como el plomo, sometida a un movimiento de rotación tan rápido en el ánima del cañón, saldría de él como una masa deforme incapaz de seguir una trayectoria precisa; por esta razón la bala va dotada de una envoltura de metal duro, generalmente cuproníquel, que cubre un núcleo de plomo con aleación de antimonio. La envoltura de metal duro no se dilata por la combustión de la carga y, por tanto, la pequeña bala carece de cavidad en la base. Para obligar a que la bala tome el rayado, su diámetro es ligeramente mayor que el del ánima del cañón que ha de recorrer. Como envoltura se emplea también un metal dorado compuesto de cobre y cinc. Si la envoltura cubre todo el proyectil, excepto una pequeña zona en la base, se dice que aquél es de envoltura completa; se emplea corrientemente en armamento militar y tiro al blanco. Para la caza, el núcleo de plomo es corriente que se haga visible en la punta de la bala: tal es el tipo de bala de punta blanda. Esta y otras variantes, como la de punta hueca, punta de bronce y punta de paraguas, tienen la misión de dilatar la bala al chocar contra el blanco a fin de conseguir mayores efectos destructivos.
El modelo de bala 1906 para el rifle Springfield modelo 1903 (calibre 7,62 mm) tiene un diámetro de 7,82 mm. Su peso es de 9,7 g; su longitud, de 31,7 mm; su composición, de estaño con un 25 % de plomo y una envoltura de cuproníquel. Esta bala necesita de 3 a 3,25 g de pólvora, que le proporcionan una velocidad inicial de 823 m/s y una presión en la recámara de 3445 kg/cm2. Los cartuchos han sufrido varias modificaciones. El de 7,62 mm MI, adoptado en 1926 para las armas alimentadas por cinta, consta de una bala de 11 g, con una ojiva alargada y una inclinación de 8 grados en el culote. El de 7,62 mm/M2, adoptado en 1938 para fusiles y mosquetones, tiene una bala de base plana de 10 g de peso. El cartucho perforante de 7,62 mm/M2 va dotado de una bala de núcleo de acero templado, terminado en punta de plomo y envuelto en metal dorado, con una longitud total de 34,7 mm. Existen también cartuchos trazadores e incendiarios. En 1944 se experimentó una bala perforante e incendiaria de 12,40 mm, que fue empleada contra material enemigo durante la II Guerra Mundial para que hiciese explosión al penetrar en el depósito de gasolina de los vehículos blindados. En 1945 se perfeccionó la bala «frangible» contra blancos aéreos. Esta bala roza la pólvora interior del proyectil después de haber traspasado el blindaje especial de los objetivos aéreos. El retraso en la explosión tiene por objeto aumentar su eficacia, ya que la convierte en munición «viva» capaz de duplicar los efectos destructores. La Conferencia de la Haya prohibió el empleo de balas explosivas y expansivas (dum-dum), empleadas por vez primera en la India, donde recibieron este nombre. Presentaban la ojiva hueca y llena en su interior de plomo blando. Producían efectos mortíferos, al igual que las de caza mayor.
Para más información ver: bala.
Compartir la definición, preguntar y buscar
Usa la inteligencia artificial para resolver tus dudas
Fuentes bibliográficas y más información de historia de la bala (proyectil):
[ Imágenes relacionadas a "historia de la bala (proyectil)" ]
[ Libros sobre "historia de la bala (proyectil)" ]
[ Libros sobre "historia de la bala (proyectil)" ]
Abreviaturas empleadas en la definición
V. = Ver o Verbo
Más abreviaturas...
Más abreviaturas...
Cómo citar la definición de historia de la bala (proyectil)
Definiciones-de.com (2015). historia de la bala (proyectil) - Leandro Alegsa © 23/07/2015 url: https://www.definiciones-de.com/Definicion/de/historia_de_la_bala_(proyectil).php
¿Preguntas sobre el significado de esta palabra?: respondemos aquí
[ Imágenes relacionadas a "historia de la bala (proyectil)" ]
Esta imagen puedes emplearla con fines didácticos en la escuela, institución educativa o proyectos web.
Preguntas y comentarios
No hay ningún comentario todavía