El término abatatarse se utiliza en varios países de América Latina, como Argentina, Bolivia, Honduras, Paraguay y Uruguay, para describir un estado de turbo o intimidación.
Cuando alguien se abatata, suele sentirse avergonzado o incapaz de actuar con normalidad ante una situación.
Esta palabra refleja cómo las emociones pueden afectar nuestro comportamiento y nuestra capacidad para interactuar con los demás.