El término ablandir se refiere principalmente a la acción de hacer algo más blando o menos duro.
En un sentido más antiguo y poco utilizado hoy en día, también puede relacionarse con el verbo blandir, que implica mover algo con fuerza o agitarlo.
Aunque su uso ha caído en desuso, la esencia de ablandir sigue presente en contextos donde se busca suavizar o modificar la consistencia de un objeto o material.