En el ámbito económico y financiero, el término "abonable" se refiere a aquellos gastos, deudas o cuentas que deben ser pagadas o liquidadas.
En el contexto de los impuestos, ciertos gastos pueden ser considerados abonables, lo que permite su deducción del total de ingresos para calcular el monto final a pagar.
En Botánica, se aplica a aquellos suelos que pueden ser fertilizados para favorecer el crecimiento de plantas.
Por ejemplo, un suelo rocoso no sería abonable, ya que no proporcionaría las condiciones adecuadas para el crecimiento vegetal.
En el ámbito económico y financiero, la palabra "abonable" se refiere a cualquier tipo de gasto, deuda o cuenta que puede ser pagada o liquidada. En otras palabras, se refiere a aquellos conceptos que requieren una compensación económica por parte del deudor hacia el acreedor.
En el contexto de los impuestos, por ejemplo, ciertos gastos pueden ser considerados como abonables, lo que significa que pueden ser deducidos del total de ingresos para calcular el monto final a pagar. Estos gastos pueden incluir desde intereses de préstamos hipotecarios hasta gastos médicos o educativos, dependiendo de la legislación fiscal de cada país.
En el ámbito de los seguros, el término "abonable" se refiere a los pagos que una compañía aseguradora debe realizar a su asegurado en caso de que se cumplan determinadas condiciones establecidas en la póliza. Estos pagos pueden ser por concepto de indemnización por daños o pérdidas ocurridas, por ejemplo, en un siniestro automovilístico o un incendio.
En Botánica, que puede ser abonado en el sentido de fertilizar.
Ejemplo de uso: "Este suelo no es abonable porque es rocoso, no crecerían plantas aquí".