El término acaracolado o acaracolada se utiliza para describir algo que tiene una forma similar a la de un caracol.
Esta característica se puede observar en diversos contextos, como en la naturaleza, la arquitectura o el diseño.
La imagen de un caracol, con su espiral distintiva, evoca una sensación de curvatura y movimiento suave, lo que hace que este adjetivo sea útil para transmitir una estética particular.