El
acero es una
aleación férrica que combina hierro con cantidades reducidas de carbono, manganeso, fósforo, azufre y silicio.
Además de estos elementos, las aleaciones aceradas pueden incluir níquel, cromo, molibdeno, vanadio, tungsteno, cobalto, selenio, columbio, titanio, boro, circonio y aluminio.
Esta composición le confiere al acero propiedades únicas que lo han convertido en un material fundamental en la industria y la construcción.
La historia del acero se remonta a siglos atrás, siendo un material clave en el desarrollo de la humanidad.