La palabra acólita se refiere a una religiosa que desempeña funciones de acólito o ceroferario, especialmente en el contexto de la iglesia.
En Chile, este término se utiliza para describir a aquellas mujeres que asisten en ceremonias religiosas, ayudando en la liturgia y en la preparación del altar.
Su papel es fundamental en la celebración de rituales, aportando un sentido de devoción y servicio dentro de la comunidad religiosa.