f. Hist. Acrópolis es la ciudadela alta, especialmente la de Atenas. Se refiere a la parte más elevada de una ciudad o un asentamiento, que generalmente está fortificada, y que sirve como centro religioso, político y social.
La Acrópolis más famosa es la de Atenas, que contiene varios templos y monumentos antiguos, incluyendo el Partenón.
Además de la Acrópolis de Atenas, existen muchas otras acrópolis en diversas ciudades antiguas de todo el mundo. Estas estructuras arquitectónicas son un testimonio del poder y la importancia de esas ciudades en épocas pasadas.
La construcción de una acrópolis se remonta a la antigüedad clásica, donde se utilizaba como un lugar seguro para la ciudad y su gente. La ubicación elevada permitía una mejor defensa contra los posibles atacantes, ya que era más fácil de proteger y controlar desde esa posición.
Además de su función defensiva, la acrópolis también servía como el centro religioso y político de la ciudad. En muchos casos, se construían templos y santuarios en la cima de la acrópolis, donde se realizaban ceremonias religiosas y se honraba a los dioses. También era común encontrar edificios administrativos y residencias de líderes políticos en este lugar.
La acrópolis no solo servía como un símbolo de poder y estatus de la ciudad, sino que también era un lugar de encuentro social. Durante festivales y celebraciones, la gente se congregaba en la acrópolis para participar en eventos culturales y deportivos, así como para disfrutar de las vistas panorámicas que ofrecía desde su ubicación elevada.
Origen etimológico de acrópolis: proviene de la palabra griega antigua ακρόπολις (akrópolis)
Segundo diccionario: acrópolis
f. El sitio más alto y fortificado de las ciudades griegas.2º artículo
Nombre dado por los griegos a las eminencias fortificadas en torno a las cuales construían muchas de sus ciudades.
La acrópolis servía también como lugar sagrado en que se concentraban los principales templos y obras de arte.
Las más famosas acrópolis fueron las de Micenas, Tirinto, Argos, Corinto, Tebas, Pérgamo y, singularmente, la de Atenas, conocida por la Acrópolis por antonomasia.
Esta última (llamada también Cecropia en honor de su presunto fundador, el rey pelasgo Cécrope) ocupa una eminencia rocosa, escarpada por todos sus lados excepto por el occidental.
El lugar se alza a 45 m sobre la llanura del Atica y aparece coronado por una planicie oval, que mide 345 m de E a O y 150 de N a S.
Con anterioridad al siglo v a. de J.C. la planicie estuvo rodeada por un antiguo muro pelasgo, que quedó convertido en ruinas, salvo en su parte septentrional, y fue remplazado por una nueva muralla llamada de Cimón.
Rodeando la base de la colina, especialmente por el S, se fueron agrupando numerosos templos y teatros, entre los que descollaban el templo de Esculapio, el teatro de Dionisos y el Odeón de Herodes Atico.
La parte superior de la colina se llenó de una serie de edificios, que figuran como los artísticamente más importantes y famosos de la historia del mundo, fruto maduro del espíritu creador ateniense en el ápice de su gloria.
A su logro contribuyeron Pericles como promotor y Fidias y una pléyade de arquitectos (Mnesicles, Ictino, Calícrates y otros) como creadores. Entre estos edificios sobresalen los Propileos, la Pinacoteca, el Templo de Niké, el Erecteón, el Partenón, etc. Véase Atenas; Partenón.
• « La ciudad romana de Bílbilis está situada en el cerro de Bámbola, a 6 kilómetros de la localidad. Se conservan algunos restos del teatro excavado en la roca y parte de la muralla de la acrópolis. »
• « Azada, a 50 kilómetros de Alcañiz posee restos de asentamientos prehistóricos como la Acrópolis de "Cabezo Palao", o los yacimientos arqueológicos de la Dehesa de los Padriñales. »