El acullico es una costumbre tradicional de los pueblos andinos sudamericanos que consiste en masticar una pasta de coca llamada acullico.
Esta pasta se elabora con hojas de coca trituradas, cenizas de quinua y papa cocida, y se mastica para obtener un líquido estimulante.
También conocido como chacchado, akulliku, acuyico, chusqua, acusi, pijcho, pikchar, coquear o mascar coca, el acullico es una práctica arraigada en la cultura de Argentina, Bolivia y Perú.
m. Arg., Bol. y Perú. Pasta de coca que se está mascando. se forma una bolita de coca utilizando hojas trituradas y se combina con cenizas de quinua y papa cocida, utilizada para masticar y obtener un líquido estimulante.
El acullico es una práctica ancestral que forma parte de la cultura de los pueblos andinos sudamericanos.
Otros nombres con el que se conoce esta práctica: chacchado, akulliku, acuyico, chusqua, acusi, pijcho, pikchar, coquear o mascar coca.
Este proceso se realiza en ciertas áreas de Sudamérica, como Bolivia, Perú, Argentina y Chile, así como en los resguardos indígenas de Ecuador y Colombia, con el fin de prevenir o reducir los efectos del mal de altura causado por la falta de oxígeno en altitudes elevadas, disminuir los efectos de la fatiga, el hambre y la indigestión.
En el idioma quechua cusqueño, se utiliza la palabra "hallpay" para referirse al acto de masticar las hojas de coca.
En términos generales, el proceso de masticado se acompaña de la introducción en la boca de una pequeña cantidad de una sustancia alcalina, como bicarbonato de sodio, cal o cenizas de una planta quemada conocida como lejía, o llipta en el caso de cenizas de quinua, para potenciar el efecto.
La cal se almacena en un recipiente llamado "calero" y se extrae con una aguja para luego llevarla a la boca y colocarla sobre el bolo de coca.
En el caso de la lejía o llipta, se adquiere en forma de pequeñas barras de color gris claro u oscuro y se coloca pequeños trozos entre las hojas seleccionadas antes de llevarlas a la boca.
Después de extraer el jugo de las hojas, se coloca el "kuka hach'u", que es el bolo de hojas masticadas, en un lugar seguro.
El chacchado de la hoja de coca se remonta a unos 8000 años en los Andes. En la cultura Moche, se encuentran evidencias de este proceso en las vasijas cerámicas. En los Andes de Perú, se considera de buena educación realizar una plegaria andina llamada "pukuy" con un kintu antes de llevar las hojas a la boca y hacer el chacchado.
Después de la colonización, este hábito fue mal visto, pero persistió como fuente de sustento para los indígenas que realizaban trabajos duros como la minería y la mita en el Cerro Rico de Potosí, Bolivia.