Adamástor es un personaje mitológico de la obra Los Lusíadas escrita por Luís de Camões.
En esta epopeya, se le describe como el gigante de las tempestades, quien se convierte en el guardián del Cabo de las Tormentas tras ser rechazado por la ninfa Tetis.
Este personaje simboliza la fuerza y la furia de los elementos naturales, especialmente del mar embravecido.
Su presencia representa los peligros y desafíos que los navegantes portugueses enfrentaban al aventurarse en aguas desconocidas durante la era de los descubrimientos.
Definición de Adamástor (el gigante de las tempestades)
Lit. Célebre personaje mitológico, del tipo griego, perteneciente a Los Lusíadas (en portugués: Os Lusíadas), una epopeya en verso escrita por Luís de Camões (Lisboa, circa 1524, muerto el 10 de junio de 1580), gran escritor y poeta portugués, y publicada en el año 1572.
Adamástor: el gigante de las tempestades
En esta epopeya se describe a Adamástor como un "gigante de las tempestades", que se transformó en el guardián del Cabo de las Tormentas (o Cabo de Buena Esperanza), después del rechazo de la ninfa Tetis.
Adamástor es un símbolo de las fuerzas de la naturaleza que los navegantes portugueses debían enfrentar en la era de la exploración del mundo.
Camões incorpora a este personaje como uno de los Gigantes griegos mitológicos, el cual es rechazado por Tetis y ahora aparece en forma de amenazante nube de tormenta para Vasco da Gama; su potencia era un desafío que podía arruinar a cualquiera que fuera lo suficientemente fuerte como para pasar el Cabo de Buena Esperanza y penetrar al Océano Índico, que era el dominio de Adamastor.
En el Mirador de Santa Catarina (Miradouro de Santa Catarina) en la ciudad de Lisboa (Portugal), se encuentra una estatua representativa de este personaje ficticio. Esculpida por Júlio Vaz Júnior e inaugurada en el año 1927. Desde allí se observa el río Tagus, el puente 25 de abril y el monumento de Cristo Rey. Licencia
Este mítico personaje también es mencionado en otras obras como El año de la muerte de Ricardo Reis de José Saramago, donde se menciona tanto su estatua como el personaje mitológico.
En La primera vida de Adamastor de André Brink, se escribe una versión adaptada al siglo 20 de Adamastor.
También se lo menciona en la ópera L´Africaine de 1865 acerca de Vasco da Gama y escrita por el compositor Giacomo Meyerbeer. En esta el esclavo Nelusko canta una canción sobre Adamastor mientras él mismo conduce deliberadamente el barco en una tormenta y se hunde.
Se menciona también en de Voltaire, en Les Misérables de Victor Hugo, en el Fantasma de la ópera de Gaston Leroux, entre otras.
La aparición de Adamastor de Carlos Reis. Imagen de dominio público.
Resumen de Los Lusíadas
Los Lusíadas es considerada una de las mayores epopeyas de época culta del Renacimiento. Fue publicada en el año 1572, tres años después de que su autor regresara de Oriente tras haber sido embarcado como soldado en la expedición de Alvares Cabral a la India. Sufrió un sinnúmero de calamidades en Macao y en Goa, y naufragó en el Golfo de Tonkín; perdió múltiples poseía, pero logró conservar el manuscrito de Os Lusíadas, escrito a lo largo de todos esos años de penuria, que habría de darle inmarcesible fama y situarle en primer lugar entre los épicos portugueses.
El poema consta de 10 cantos, divididos en 1102 octavas reales con casi 9000 versos, y narra la expedición Lusitana (de Luso, hijo de Baco, mítico fundador de Portugal) a la India.
Comienza describiendo las deliberaciones de los dioses olímpicos sobre la conveniencia de ayudar u oponerse a los navegantes, narra después los tropiezos de Vasco de Gama en Mozambique y Mombasa, su feliz llegada a Melinde protegido por Venus, quien le salvará también de las furias del océano, desencadenado contra él por Baco, y la arribada final a la India; las tretas del Zamorín para perder a los portugueses y la fidelidad del converso Monzaide.
Logran finalmente escapar los portugueses y en el viaje de regreso son acogidos por Venus y sus ninfas en prodigiosa isla. Quizá sean sus episodios más bellos el de Inés de Castro y la aparición de Adamastor, personificación del Cabo de las Tormentas.
La obra acaso adolezca de la excesiva preocupación de su autor por seguir a Homero y Virgilio, pero es un bellísimo canto al tesón del hombre y a la humanidad, aparte de contener intercalada una lírica descripción de los principales episodios de la historia portuguesa; verdadera epopeya de navegantes más que de conquistadores, hizo famoso a su autor apenas publicada (1572), a pesar de lo cual, y de la pensión concedida por el rey don Sebastián, Camoens moriría en la mayor miseria.