La adaptabilidad es la capacidad de ajustarse a diferentes circunstancias o entornos.
Esta cualidad permite a las personas, organizaciones o sistemas responder de manera efectiva a los cambios y desafíos que se presentan en su entorno.
Ser adaptable implica flexibilidad y la habilidad de aprender y evolucionar, lo que resulta esencial para el crecimiento y la supervivencia en un mundo en constante transformación.