El término alacate se refiere a una especie de calabaza conocida como acocote, muy utilizada en la cultura mexicana.
Este fruto, que se caracteriza por su forma alargada y su piel dura, ha sido parte de la tradición culinaria y artesanal en México.
Además de su uso en la gastronomía, el alacate también se emplea en la elaboración de utensilios y decoraciones, reflejando la riqueza cultural del país.