El término alardo se refiere a una formación militar en la que se realizaba una reseña de los soldados y sus armas.
Esta acepción, aunque rica en historia, es considerada anticuada y se encuentra en desuso en el lenguaje actual.
Su uso evoca imágenes de épocas pasadas, donde la militarización y la exhibición de fuerzas eran comunes, reflejando un aspecto importante de la organización bélica de antaño.