La alcalosis es una condición médica que se caracteriza por la alcalinidad excesiva de la sangre.
Este desequilibrio puede surgir en diversas enfermedades y se manifiesta a través de síntomas que suelen ser opuestos a los de la acidosis.
Comprender la alcalosis es fundamental para el diagnóstico y tratamiento adecuado de los trastornos relacionados con el equilibrio ácido-base en el organismo.
f. Pat. Alcalinidad excesiva de la sangre. Ocurre en algunas enfermedades y se manifiesta por síntomas opuestos, por lo común, a los producidos por la acidosis.2º artículo
Término que se emplea para designar un estado del organismo humano caracterizado por un aumento anormal de la reserva alcalina (v. Sangre). Si se produce un descenso de acidez sin una disminución concomitante de la cantidad de álcalis o de bases o si se elaboran o se ingieren los álcalis en mayor cantidad de lo que el organismo puede eliminar o neutralizar por los procesos metabólicos normales, se cae en el estado de alcalosis.
Una causa frecuente de alcalosis es el excesivo aumento de cuerpos alcalinos, por lo general en forma de bicarbonato sódico, sin aumento compensador del H2CO3, que ocurre en el tratamiento de la úlcera péptica. También puede conducir a este estado la pérdida de ácido clorhídrico que producen los vómitos persistentes.
Los síntomas de la alcalosis consisten en dolor de cabeza, intranquilidad, temblor palpebral, náuseas, vómitos, sensación de gran sequedad en la boca, y puede aparecer también sensación de tirantez y temblor en los músculos faciales. La orina contiene pocos cloruros y pocas bases amónicas; además cabe una complicación del cuadro por la aparición de insuficiencia renal, hecho muy grave capaz de producir la muerte del enfermo.
El tratamiento depende de la causa que haya provocado la alcalosis. Si el cuadro se debe a la administración de cantidades excesivas de alcalinos, se suspenderá su administración y se indicará la ingestión de ácido clorhídrico diluido para restablecer el equilibrio ácido-base. El mismo tratamiento, a base de ácido clorhídrico, será válido en los casos en que el síndrome se caracteriza por vómitos persistentes.
La alcalosis puede aparecer también a consecuencia de un aumento de la frecuencia respiratoria, como el que se produce, por ejemplo, en las grandes alturas donde la densidad del aire es menor; a consecuencia de esta polipnea se elimina gran cantidad de anhídrido carbónico, con lo que se produce un aumento relativo de los cuerpos alcalinos contenidos en la sangre. El tratamiento se limitará en estos casos a hacer respirar al enfermo por un tubo que termina en un depósito; al volver a inspirar de nuevo el paciente, introducirá en su organismo el anhídrico carbónico que había expulsado. También se puede tratar el cuadro haciendo inspirar al paciente una mezcla adecuada de oxígeno y de anhídrico carbónico.