Alfonso XI El Justiciero fue un destacado rey de Castilla y León que gobernó entre 1311 y 1350.
Huérfano desde muy joven, su abuela, Doña María de Molina, lo protegió durante su infancia.
Ascendió al trono tras ser declarado mayor de edad por las Cortes de Valladolid en 1325.
Su reinado se caracterizó por la Reconquista, logrando importantes victorias, aunque su muerte en el asedio de Gibraltar truncó sus ambiciones.
Biografía de Alfonso Xi El Justiciero
(1311-50). Rey de Castilla y León, hijo de Femando IV El Emplazado y Constanza de Portugal, que lo dejaron huérfano en la más tierna edad, cuando sólo contaba respectivamente uno y dos años. Tras una minoría turbulenta, en que guardó su persona e intereses aquella gran mujer que fue su ilustre abuela Doña María de Molina, se hizo cargo del poder a la muerte de ésta (1321). Para ello hubo de ser declarado mayor de edad por las Cortes de Valladolid (1325), declaración a la que se opusieron los infantes Don Juan «El Tuerto» y Don Juan Manuel. Para superar tal resistencia el Rey hizo dar muerte al primero y casó con la hija del segundo, aunque luego se separaría de ella para contraer matrimonio con María de Portugal, de la que tuvo a Pedro II. Alentó extraordinariamente la Reconquista con sus victorias en los ríos Salado (1340) y Palmones (1343) y la toma de Algeciras, pero su muerte en el sitio de Gibraltar le impidió coronar su obra. Creó la Orden de la Banda y dictó el Ordenamiento de Alcalá en refuerzo de Las Partidas como código legislativo. De su amante Leonor de Guzmán tuvo al bastardo Enrique «el Fratricida», que luego arrebataría la corona a su hermanastro Pedro I e instauraría la dinastía de los Trastamara.