La alharma es una planta de origen oriental que ha sido utilizada desde tiempos antiguos por sus propiedades aromáticas y medicinales. Sus semillas, conocidas como harmal, son empleadas como condimento en la cocina de diversas culturas, aportando un sabor único y característico a los platos. Además, se ha descubierto que la alharma posee propiedades terapéuticas, siendo utilizada en la medicina tradicional para tratar diversas dolencias.
En algunas regiones, la alharma también se ha empleado con propósitos rituales y ceremoniales, debido a sus supuestas propiedades psicoactivas. Se cree que ciertas civilizaciones antiguas utilizaban esta planta en ceremonias religiosas y prácticas chamánicas para inducir estados alterados de conciencia.