El término almizclar se refiere a la acción de aderezar o aromatizar algo utilizando almizcle, una sustancia fragante que proviene de ciertas glándulas de mamíferos o de fuentes sintéticas.
Este proceso se utiliza comúnmente en la elaboración de perfumes y productos aromáticos, aportando un toque distintivo y profundo a las fragancias.
Almizclar, por tanto, no solo implica añadir aroma, sino también enriquecer la experiencia sensorial.