El término almófar se refiere a una parte de la armadura antigua, específicamente una cofia de malla que se utilizaba para proteger la cabeza.
Este elemento se colocaba debajo del capacete, ofreciendo una capa adicional de defensa en el contexto de la guerra.
Su diseño permitía combinar movilidad y protección, siendo esencial para los guerreros de épocas pasadas que buscaban resguardarse en el campo de batalla.