El término alongadero y su variante alongadera se refieren a algo que es dilatorio, es decir, que tiene la capacidad de prorrogar o retardar acciones o procesos.
Estas palabras son consideradas anticuadas y han caído en desuso, lo que las convierte en un vestigio del lenguaje que refleja una forma de hablar más antigua.
Su significado evoca la idea de una pausa o un retraso en el avance de situaciones.