El término amalladar proviene del árabe y se relaciona con la acción de hacer noche el ganado en una majada.
Aunque su uso es considerado anticuado y se encuentra en desuso, esta palabra refleja prácticas tradicionales en la cría de animales, especialmente en regiones como Aragón.
Su significado evoca una conexión con el pasado rural y las costumbres relacionadas con el manejo del ganado.