El término amesnador se refiere a una figura histórica que desempeñaba un papel importante en la protección y custodia.
En su primera acepción, se define como el que amesna o guarda, aunque esta definición es considerada anticuada y actualmente está en desuso.
En un contexto más específico, el amesnador era la persona encargada de guardar la seguridad del rey en el palacio, reflejando así su relevancia en la corte.