El término anamórfico se refiere a sistemas ópticos que generan imágenes deformadas mediante superficies curvas, como los espejos cóncavos y convexos.
En el ámbito de la fotografía, un objetivo anamórfico utiliza prismas para capturar un campo más amplio, permitiendo comprimir imágenes panorámicas en un formato estándar.
Además, se aplica en la mineralogía y describe un estado asexual en los hongos.
Su uso en cine y fotografía crea efectos visuales únicos.
adj. Dícese de los sistemas ópticos constituidos por superficies curvas que producen imágenes deformadas de los objetos como son los espejos cóncavos, convexos, etc.
Miner. Se dice del cristal cuyo núcleo es de forma distinta de la suya.
Estado asexual de los hongos.
Fotog. El objetivo anamórfico es el que incorpora prismas o elementos cilíndricos que le permiten cubrir un campo mayor en vertical que en horizontal y viceversa, produciendo una imagen estirada o comprimida que recupera su aspecto original si se proyecta o amplía a través de un objetivo similar.
El objetivo anamórfico es empleado en cine para comprimir una panorámica muy amplia en un fotograma de formato normal y reproducirla nuevamente en la pantalla (Cinemascope).
En fotografía se utiliza para crear efectos especiales o para proyectar diapositivas en pantallas muy grandes.
Geol. Caracterizado por una complejidad progresiva.
Etimología u origen de la palabra anamórfico: (proviene de anamorfosis).