Un ángulo entrante es aquel cuyo vértice se encuentra dentro de la figura o cuerpo al que pertenece, a diferencia de un ángulo saliente.
Se caracteriza por ser mayor que un ángulo llano pero menor que un ángulo completo, es decir, su medida está entre 180° y 360° sexagesimales.
También conocido como ángulo cóncavo o reflejo, el ángulo entrante es fundamental en geometría para comprender las relaciones espaciales entre diferentes elementos.
m. Geom. Ángulo cuyo vértice entra en la figura o cuerpo de que es parte. Contrasta con el ángulo saliente.
El ángulo entrante es siempre mayor que un ángulo llano, pero menor que un ángulo completo, es decir, mayor de 180° y menor de 360° sexagesimales. También es llamado cóncavo o reflejo.
Ejemplo de una figura irregular donde se señala un ángulo entrante (su vértice entra en la figura) y un ángulo saliente (su vértice sobresale de la figura). Un ángulo entrante siempre tiene entre 180° y 360°; en tanto un ángulo saliente siempre tiene entre 0° y 180°
Ejemplo de ángulo entrante. Siempre tiene más de 180° y menos de 360°
Un triángulo no tiene ningún ángulo entrante, todos son salientes.
Un cuadrilátero puede tener un único ángulo entrante como máximo. En la imagen de ejemplo de abajo, el cuadrilátero rojo es el único con un ángulo entrante.
En estos cuadriláteros solo la figura roja tiene un ángulo entrante. El resto de los ángulos de todas las figuras son salientes.