Un ángulo oblicuo es aquel que no mide 90 grados ni múltiplos de esta medida, siendo más amplio que un ángulo recto en Geometría.
En el ámbito de la Cinematografía, se le conoce como ángulo holandés, plano o inclinación holandesa.
Consiste en colocar la cámara de forma que las líneas verticales estén inclinadas en el encuadre, generando un efecto visual de tensión o malestar psicológico en el sujeto filmado.
Esta técnica busca transmitir una sensación de desequilibrio o inestabilidad al espectador, similar a inclinar la cabeza hacia un lado.
m. En Geometría, ángulo que es mayor o más abierto que el ángulo recto. En otras palabras, es aquel ángulo que no es de 90 grados ni múltiplo de 90.
En Cinematografía, otro nombre para el ángulo holandés, también conocido como plano o inclinación holandesa o ángulo inclinado, es un tipo de toma de cámara que consiste en colocar la cámara en un ángulo en su eje de balanceo de manera que el plano esté compuesto de líneas verticales en un ángulo al lado del cuadro, o de manera que la línea del horizonte del plano no sea paralela a la parte inferior del cuadro de la cámara. Esto produce un punto de vista similar a la inclinación de la cabeza hacia un lado.
El ángulo holandés u oblicuo es una de las muchas técnicas cinematográficas que se utilizan a menudo para retratar el malestar psicológico o la tensión en el sujeto que se filma.