El término apangarse se utiliza en Honduras para referirse a la acción de agacharse.
Este verbo refleja un movimiento físico que implica bajar el cuerpo, ya sea por razones de comodidad, para evitar ser visto o para realizar alguna actividad más cerca del suelo.
En el contexto hondureño, esta palabra puede tener connotaciones específicas según la situación en la que se emplee, destacando su uso en el habla cotidiana.