La palabra aplacable se refiere a algo o alguien que es fácil de aplacar.
Este término sugiere una capacidad para calmar o tranquilizar, ya sea en situaciones de tensión emocional o en contextos más generales.
La idea de ser aplacable implica que, ante un conflicto o descontento, se puede encontrar una solución o un modo de restablecer la paz sin grandes dificultades.