El término árbor es una forma antigua y en desuso de referirse a un árbol, que se define como una planta perenne con un tronco leñoso que se ramifica a cierta altura del suelo.
Aunque hoy en día se prefiere el uso de "árbol", la palabra árbor evoca una conexión con el lenguaje y la naturaleza de épocas pasadas, recordándonos la riqueza del vocabulario histórico en nuestra lengua.