El término ardero se refiere a un tipo de perro utilizado en la caza, especialmente para rastrear y atrapar presas.
Este animal es conocido por su agilidad y olfato agudo, lo que lo convierte en un compañero valioso para los cazadores.
Por otro lado, ardera es la forma femenina del adjetivo, que también se relaciona con este tipo de perro, destacando su importancia en el ámbito cinegético.