La arqueología de la cultura misisipiense se refiere a un periodo posterior a la cultura hopewell, caracterizado por el desarrollo de sociedades complejas en el sur y oeste medio de los Estados Unidos.
Esta cultura destacó por su agricultura avanzada, la construcción de ciudades con casas rectangulares, y la creación de impresionantes pirámides truncadas.
Los misisipienses también practicaban rituales funerarios, diferenciándose de otras culturas contemporáneas.
arqueología: cultura misisipiense
En tiempos posteriores a la cultura hopewell, pero todavía prehistóricos, empezó a desarrollarse una cultura, la del Misisipí, que alcanzó gran expansión en el S y O Medio de los Estados Unidos. La agricultura revistió gran importancia; las ciudades, de considerable tamaño, se componían de casas rectangulares construidas de materiales ligeros y bálago; la industria lítica se realizaba principalmente por desprendimiento de lascas; la alfarería adoptó gran variedad de formas y la decoración fue profusa. A diferencia de los pueblos de la región de los bosques ya mencionados, los misisipienses enterraban a sus muertos en cementerios. También construyeron túmulos, pero no como parte del culto a los muertos. Los edificios para sus ceremonias descansaban sobre pirámides truncadas rectangulares. A pesar de estar hechas de tierra, estas estructuras alcanzaban enormes proporciones. Una de las pirámides truncadas de Illinois Meridional (Kincaid) cubría 80 a de terreno y se alzaba a 9 m de altura; en cuanto al túmulo Great Cahokia, en East St. Louis, igualaba casi en volumen a la Gran Pirámide egipcia. Generalmente se admite que estas culturas del Misisipí recibieron la influencia mexicana, sin perjuicio de que, al igual que sucediera en el SO, su desarrollo fuera característico.