El término arrimón se refiere a una persona que se encuentra esperando en la calle durante un periodo prolongado, generalmente apoyada o arrimada a la pared.
Esta acción puede transmitir una sensación de desesperanza o de pasividad, ya que el individuo parece estar en una situación de espera sin un propósito claro.
El uso de esta palabra refleja una realidad urbana donde las personas a menudo se ven obligadas a esperar en espacios públicos.