La palabra asmoso o asmosa se refiere a una cualidad antigua que describe a una persona que es discursiva y tiene la capacidad de pensar de manera reflexiva.
Aunque esta acepción está en desuso, evoca una época en la que se valoraba el pensamiento profundo y la habilidad para articular ideas de forma clara.
Hoy en día, su uso es raro, pero su significado nos recuerda la importancia de la reflexión en la comunicación.