El término asobinarse se refiere a una situación en la que una bestia queda atrapada tras una caída, con la cabeza entre sus patas, incapaz de levantarse por sí sola.
Esta acción también se extiende a las personas, que al caer pueden quedar en una posición similar, formando un ovillo.
Así, el concepto evoca una imagen de vulnerabilidad y dificultad para recuperarse tras un tropiezo, ya sea físico o metafórico.