Aspérrimo y aspérrima son adjetivos que se utilizan para describir algo extremadamente áspero.
Son formas superlativas de la palabra "áspero".
Aunque su uso es poco común en la actualidad, es importante destacar que también existe el superlativo regular "asperísimo".
Estas palabras se emplean para enfatizar la idea de aspereza en un objeto, superficie o situación, indicando un grado máximo de rugosidad o falta de suavidad.