La palabra atildado se refiere a una persona que se presenta de manera pulcra y elegante, mostrando un cuidado especial en su apariencia y comportamiento.
En un sentido más figurado, también describe un estilo que puede resultar rebuscado o excesivamente elaborado.
Así, ser atildado implica no solo un sentido estético, sino también una cierta sofisticación en la forma de expresarse o de actuar.
Origen de la palabra: participio del verbo «atildar» que se construye modificándolo así: atildado
p. La palabra "atildado" es un participio del verbo "atildar", lo que significa que se utiliza como un adjetivo para describir algo que ha sido arreglado o adornado con cuidado.
Por ejemplo, un hombre con su traje ajustado y su corbata perfectamente anudada puede ser descrito como atildado.
También se puede utilizar para describir la apariencia de un edificio o una habitación bien cuidados y decorados.
Además, este participio indica siempre una acción que ya ha ocurrido en el pasado y denota el aspecto perfectivo de la misma.
Por ejemplo, "he atildado mi jardín" significa que ya arreglé y decoré mi jardín con cuidado en el pasado.
También se puede utilizar en tiempos compuestos como "había atildado", "habré atildado" y "habrán atildado", así como en la voz pasiva, como en la oración "El vestido fue atildado por la modista".
En resumen, "atildado" es un participio pasado del verbo "atildar", que se utiliza como un adjetivo para describir algo que ha sido arreglado o adornado con cuidado y denota siempre una acción ya ocurrida en el pasado.
• « Completamente atildado, se quitó su chaqueta de traje de rayas negras y blancas, con su estilo cuadrado de bolsillo, y se entrelazó entre ellos, su voz siempre se alzaba. »
