La expresión “Australia: arte y literatura aborigen” nos invita a explorar la rica herencia cultural de los pueblos indígenas australianos.
A lo largo del tiempo, se ha desafiado la idea errónea de que estos grupos eran salvajes primitivos, revelando en cambio su notable capacidad artística y su contribución a la cultura australiana.
Desde las impresionantes pinturas rupestres en Kimberley hasta la vibrante literatura oral, que incluye mitología y poesía, el arte aborigen es un testimonio de su profunda conexión con la tierra y su historia.
Australia: arte y literatura aborigen
Hace un siglo los indígenas australianos eran considerados como salvajes primitivos, incapaces de apreciar cualquier manifestación estética. Un conocimiento más exacto de sus costumbres y su arte ha demostrado no sólo la existencia real de su capacidad artística, sino la positiva cooperación indígena a la tradición común australiana. En los Kim-berley, situados al N de la región occidental australiana, se han hallado las notables pinturas rupestres Wondjina. Muchos artistas aborígenes utilizan como «lienzo» una corteza de árbol filamentoso, debidamente desbastada y alisada, y se sirven de pinceles fabricados con cabello humano y de paletas de piedra, en las que mezclan los diversos colores con savia de orquídeas.
Literatura aborigen. La mayor parte de la literatura aborigen —mitología, cuentos populares, teatro y poesía— se ha transmitido por tradición oral, generalmente en forma de canciones. Toda la producción literaria revela cruda vitalidad, conjugada con una cuidadosa elección de los temas, de las imágenes retóricas y un gran dominio del sentido dramático. Muchas de las canciones indígenas se han traducido y publicado adaptando la rima y la música al modo europeo.