La palabra azotable se refiere a algo o alguien que merece recibir un castigo físico, específicamente un azote.
Este término se utiliza en contextos donde se considera que la conducta o acciones de una persona son tan reprobables que justifican una reprimenda severa.
Aunque su uso puede ser más común en contextos literarios o históricos, su significado subraya la idea de que ciertas actitudes pueden ser objeto de condena o penalización.