El bahaísmo es una religión fundada por Baha’u’llah, quien se basó en las enseñanzas del Bab, su precursor.
Proclamada en Persia en el siglo XIX, esta fe sostiene la unicidad de todos los profetas y llama a los gobernantes a servir a Dios para asegurar su poder.
Promueve la igualdad de género, prohíbe la poligamia y el uso de sustancias tóxicas.
A pesar de la persecución, el bahaísmo ha perdurado, defendiendo valores de justicia y unidad.
Religión creada por Baha’u’llah sobre las bases establecidas por el Bab (1819-50), su heraldo y precursor, que en 1844 proclamó su misión en Persia. El Bab se identificó asimismo con el prometido Qa’im, autorizado para anular la misión de Mahoma. Sus enseñanzas afirman la unicidad de todos los profetas, advierten a reyes y gobernantes que su poder material sólo será duradero si sirven la causa de Dios e inducen a sus prosélitos a reconocer y aceptar al ser superior destinado a aparecer. El bahaísmo prohibía la poligamia y el divorcio, desalentaba el ascetismo, se opuso al uso de licores tóxicos y abogó por la igualdad social de las mujeres y la abolición del velo. Los dirigentes islamitas y la corte del shah se coaligaron para aplastar la nueva secta, fusilaron a Bab (1850) en Tabriz y martirizaron a más de 20000 bahaístas. Baha’u’llah se anunció en 1863 a los partidarios de Bab desterrados con él en Bagdad. Los destierros y encarcelamientos jalonaron toda su vida. Murió en Akka (Acre, Siria).
Las enseñanzas fundamentales del bahaísmo son: la fraternidad universal, la unidad e índole progresiva de la revelación y la seguridad de la victoria de la justicia en la Tierra. El bahaísmo no admite barreras de raza, clase, nación o credo y sostiene un concepto de paz mundial que une a la Humanidad en una fe y en una orden. El culto a Dios se realiza sin liturgia, sin jerarquías, sin prédicas ni ofrendas. Desde 1892 hasta 1921 Abdul Baha, hijo mayor de Baha’u’llah, dirigió los asuntos y guió las actividades del nuevo credo, que logró difundir en varios países. Viajó y dio conferencias en Europa y América desde 1911 a 1913. Formuló instrucciones para la administración de la fe por instituciones electivas locales, nacionales e internacionales bajo la dirección del Guardián, Shoghi Effendi. Los prosélitos sólo aceptan como autoridad espiritual al guía, verdad o institución emanadas de las manifestaciones divinas que llegan a la Tierra para purificar, renovar y desarrollar la religión a intervalos de 1000 años aproximadamente.
Existen bahaístas en 229 países o regiones. Celebran asambleas locales en más de 100 ciudades de América septentrional, central y meridional. La compilación más extensa de los escritos de Baha’i es el volumen Fe universal de Baha'i (1944)