Un banco de sangre es una instalación médica dedicada a la provisión y almacenamiento de sangre clasificada en diferentes grupos sanguíneos.
Su función principal es garantizar la disponibilidad de sangre para transfusiones en situaciones de emergencia, cirugías o tratamientos médicos.
Estos bancos realizan rigurosos controles para asegurar la calidad y seguridad de la sangre, contribuyendo así a salvar vidas y mejorar la salud de los pacientes.