La basicidad es una propiedad química que se refiere a la capacidad de ciertos cuerpos para actuar como bases.
Esta característica permite que estas sustancias, como la sosa, neutralicen ácidos y participen en diversas reacciones químicas.
La basicidad es fundamental en la química, ya que influye en el comportamiento de los compuestos y su interacción con otros elementos, siendo clave en procesos industriales y biológicos.