La batisfera es un ingenio sumergible diseñado para que dos tripulantes puedan observar y fotografiar la vida marina en las grandes profundidades.
Consiste en una cámara de acero esférica, hermética al agua y al aire, equipada con ventanas de cristal de cuarzo y un potente foco.
Este dispositivo ha permitido explorar hasta 1375 metros bajo el agua, revelando los misterios del océano y contribuyendo al avance de la exploración marina.
Ingenio sumergible que permite a dos tripulantes observar y fotografiar la vida marina de las grandes profundidades. Trátase de una cámara de acero esférica, hermética al agua y al aire, de 1,5 m de diámetro, provista de tres ventanas circulares de cristal de cuarzo, deshidratantes químicos y un potente foco. La esfera mantiene contacto con el buque motor por un tubo de oxígeno, una línea telefónica y un resistente cable mediante el cual es sumergida y elevada. En 1934 William Beebe, naturalista, y Otis Barton, proyectista y constructor de la batisfera, alcanzaron una profundidad de 920 m en aguas de las Bermudas. En 1949 Barton descendió a 1375 m en las costas de California con un artefacto similar, más sólido, que denominó bentoscopio.
El batiscafo ideado por Auguste Piccard y Max Cosyns, es gobernado por una tripulación de dos hombres que ocupan una góndola esférica situada bajo un delgado casco naviforme lleno de gasolina, que le da una capacidad de flotación a guisa de globo submarino. El primer batiscafo naufragó en la superficie (1948). En setiembre de 1953, Piccard y su hijo Jacques descendieron en otro, el Trieste, a 3150 m cerca de Nápoles (Italia). Otro batiscafo ideado por arquitectos navales franceses, el FNRS-3, llegó en febrero de 1954, tripulado por el comandante Georges Houot y el teniente Pierre Willm, hasta los 4050 m de fondo del Océano Atlántico en aguas de Dakar. El FNRS-3 tiene poderosos proyectores, detectores de sonido, radioteléfono y otros complicados elementos de seguridad, funcionamiento e investigación. Los motores eléctricos, que permiten al batiscafo sumergirse, emerger o desplazarse horizontalmente, son gobernados desde la góndola. Su barco auxiliar lo remolca hasta el lugar de inmersión y desde allí hasta el puerto.
El bentógrafo es un artificio poco conocido empleado por la Fundación Hancock para fotografiar el fondo del mar y la fauna marina. Es una esfera hueca y hermética de 1 m de diámetro con paredes de acero de 4 cm de espesor y tres ventanas de cristal de cuarzo. El bentógrafo es sumergido e izado por un torno del barco auxiliar que transporta cerca de 4000 m de cable. La energía eléctrica que acciona la potente luz y la cámara de múltiples disparos es suministrada por las baterías eléctricas de la esfera. Véase Buceo y campana de buzo.