Se encuentra allí un castillo y ermita de San Sebastián, ésta del siglo xiii.
Cuna de Sebastián de Belalcázar, adelantado y Capitán General fundador de Cali, Quito y Guayaquil.
Belalcázar es un municipio que se distingue por su rica historia y patrimonio cultural, situado en la comarca de Los Pedroches, en el norte de la provincia de Córdoba, Andalucía.
Este municipio, con una población que ronda los 3.200 habitantes, se extiende sobre un paisaje caracterizado por dehesas y olivares, siendo un reflejo del típico entorno rural andaluz.
El castillo de Belalcázar, uno de los más imponentes y mejor conservados de la región, domina el paisaje desde su posición elevada. Esta fortaleza, que data del siglo XV, fue construida sobre los restos de una alcazaba árabe y ha sido testigo de numerosos episodios históricos a lo largo de los siglos. Su torre del homenaje es una de las más altas de Andalucía, ofreciendo vistas panorámicas espectaculares del entorno.
Este edificio religioso, originario del siglo XIII, aunque reformado en épocas posteriores, es un ejemplo notable de la arquitectura medieval en la región. La devoción a San Sebastián se manifiesta especialmente durante las festividades locales, cuando la comunidad se reúne para celebrar su fe y tradiciones.
Belalcázar no solo es conocido por su patrimonio monumental sino también por ser el lugar de nacimiento de Sebastián de Belalcázar, una figura clave en la conquista y exploración del Nuevo Mundo. Este adelantado y Capitán General jugó un papel fundamental en la fundación de ciudades importantes en América del Sur como Cali, Quito y Guayaquil. Su legado es parte integral de la identidad cultural del municipio.
En términos económicos, Belalcázar mantiene una economía basada en la agricultura y la ganadería, siendo relevante la producción de cereales, garbanzos, así como la cría de ganado lanar y porcino.
La industria local se complementa con actividades relacionadas con la producción agroalimentaria, incluyendo una fábrica de harinas que respalda el sector agrícola del municipio.
La vida en Belalcázar está profundamente marcada por sus tradiciones y su comunidad. Las festividades locales, como las ferias y fiestas patronales, son una expresión viva del patrimonio cultural del municipio. Estos eventos ofrecen momentos para el encuentro comunitario y la celebración, reforzando los lazos sociales y culturales entre sus habitantes.