La palabra bendicera se refiere a una mujer que, en tiempos antiguos, realizaba rituales de sanación mediante la santiguación y oraciones de carácter supersticioso.
Este término evoca prácticas que buscaban curar a los enfermos a través de creencias populares.
Aunque su uso ha caído en desuso, la figura de la bendicera representa un vínculo entre la tradición y la espiritualidad en la cultura popular.