San Benito, nacido alrededor del año 480 en Nursia, Italia, es reconocido como el fundador del monacato occidental.
Desde joven, se retiró a una cueva en Subiaco, donde vivió en soledad durante tres años.
Su creciente fama atrajo a numerosos seguidores, lo que lo llevó a fundar doce monasterios y, en 529, el célebre monasterio de Monte Cassino.
Su obra más importante, la Regula monachorum, estableció normas que transformaron la vida monástica, convirtiéndose en un modelo para las órdenes benedictinas.
Biografía de Benito, San
(c. 480-543). Fundador del monacato occidental, nacido en el seno de una opulenta familia de Nursia, cerca de Spoleto (Italia). A edad temprana se retiró a una región desierta (hoy Subiaco), donde vivió durante tres años en una caverna hasta que su fama se extendió por el país. Fue nombrado abad de un monasterio vecino, que abandonó para llevar un género de vida más riguroso. En pocos años se congregaron bajo su autoridad numerosas personas de todas clases, desde hijos de ricos romanos hasta bárbaros godos. Fundó doce monasterios. Hacia el 529 buscóse otro retiro y, acompañado de unos pocos seguidores, fundó cerca de Nápoles el monasterio de Monte Cassino, que llegó a ser uno de los más ricos y famosos de Italia. Escribió la Regula monachorum, destinada a reprimir la vida irregular y licenciosa de los monjes vagabundos llamándolos a una disciplina más severa. Finalmente su regla vino a servir de modelo a las órdenes monacales de Occidente, especialmente los benedictinos.