La benzoflavina es una sustancia química utilizada principalmente como un colorante.
Su función más destacada es la de teñir de amarillo materiales como la lana, la seda y el algodón.
Este compuesto se valora en la industria textil por su capacidad para proporcionar un color vibrante y duradero, lo que la convierte en una opción popular entre los fabricantes de tejidos.
Su uso resalta la importancia de los colorantes en la producción textil.