Bermejo, Bartolomé fue un destacado pintor español del siglo XV, probablemente originario de Córdoba.
Reconocido como uno de los más importantes primitivos españoles, su firma en algunas obras como Bartolemus Rubeus refleja su conexión con la tradición flamenca.
Documentado en Barcelona desde 1486, su técnica del óleo y su habilidad para el claroscuro le permitieron crear composiciones monumentales y detalladas, marcando un hito en la pintura aragonesa.
Biografía de Bermejo, Bartolomé
(1425-30?-98). Pintor español de origen probablemente cordobés, del que Tormo dice que es «el más recio de los primitivos españoles». En algunas de sus pinturas firma Bartolemus Rubeus, que no es sino la traducción latina de su nombre. No se conocen datos relativos a la primera época de este artista hasta que en 1486 aparece ya documentado en Barcelona. Trabajó en los Estados de Aragón, donde dio muestras de conocer todos los recursos de la técnica del óleo de la pintura flamenca, lo cual hace admisible la suposición de que pasara algún tiempo de aprendizaje en Flandes. Quizás estuviera también en Italia, donde perfeccionaría su técnica y completaría su formación artística.
En 1474 gozaba ya de prestigio en Aragón, donde introdujo el empleo de la pintura al óleo. Muestran sus obras una concepción monumental de la composición que no excluye la precisión en el detalle, realzado por el empleo estudiado del claroscuro. Su pintura es brillante y ofrece fuertes contrastes de color que dan a su arte las calidades de un estilo personal y vigoroso. Destacan entre sus obras principales el espléndido Santo Domingo de Silos del museo del Prado, que pintó para la iglesia de Daroca y del que Post dijo que «aunque Bermejo no hubiese pintado más, tendría derecho a figurar entre los grandes pintores de la tierra»; la Santa Eulalia de Boston; el San Miguel venciendo al demonio de la colección Ludlow (Inglaterra); y la magnífica Piedad del canónigo Desplá, terminada en 1490, hoy en la catedral de Barcelona.