El término bestión se refiere, en su primera acepción, a un aumento de la palabra bestia, sugiriendo una criatura de gran tamaño o fuerza.
En un contexto diferente, también designa a una bicha o monstruo que se utiliza en la ornamentación arquitectónica, aportando un toque de fantasía y singularidad a las construcciones.
Así, el concepto abarca tanto lo animal como lo artístico, enriqueciendo su significado.