Los Bolandistas son los colaboradores y continuadores de la labor hagiográfica del Acta Sanctorum, una colección dedicada a la vida de los santos.
Su nombre proviene de John Bolland, un jesuita belga que inició esta obra en el siglo XVII.
A pesar de las dificultades, como la condena de la Inquisición y la dispersión de la Compañía de Jesús, los Bolandistas lograron mantener viva su misión en Bruselas y más tarde en Tongerloo, enfrentando numerosos obstáculos a lo largo de su historia.
Nombre con que se designa a los colaboradores y continuadores —jesuítas belgas en su mayoría— de la labor hagiográfica que constituye el Acta Sanctorum. Deben su nombre a John Bolland (1596-1665), jesuita belga, que editó los cinco primeros volúmenes de la colección en Amberes en colaboración con otros jesuitas. En 1695 la Inquisición española, por divergencias de opinión, condenó y suprimió los Acta y emplazó a sus autores como herejes. La dispersión de la Compañía de Jesús en 1773 originó el traslado de la Sociedad Bolandista a Bruselas, donde un pequeño grupo de antiguos jesuitas continuó la obra hagiográfica hasta 1788. En 1789 se hizo cargo de la empresa la abadía de Tongerloo, de Brabante, pero, apenas hubo aparecido el tomo 53 en 1794, quedaron truncados los planes de publicación al ser destruidas las colecciones de manuscritos de la sociedad durante la ocupación francesa. En 1837, tras el restablecimiento de la Compañía, se formó una nueva asociación bolandista, dirigida también por jesuitas, bajo el patrocinio del Gobierno belga. En 1892 habían aparecido 65 volúmenes, la mayoría de los cuales contenían más de un millar de páginas de letra apretada a doble columna, con el índice correspondiente. Tres son las ediciones hechas de los Acta Sanctorum: la de Amberes (1643-88); la de Venecia (1734-70) en italiano; y la de París (1863-75), en francés. La Analecta Bollandiana, revista trimestral, iniciada en 1882, continúa publicándose. La redacción de la revista respeta en cada artículo el estilo de su autor. De 1886 a 1936 se publicaron también los Subsidia Hagiographica con artículos que resultaban demasiado largos para la Analecta. Los bolandistas actuales, con sede en Lovaina, se ocupan principalmente de la catalogación de manuscritos, generalmente latinos, relacionados con la hagiografía.