La palabra borricada tiene varias acepciones que reflejan su uso en el lenguaje cotidiano.
En primer lugar, se refiere a una manada de borricos, esos animales de carga conocidos por su resistencia.
También puede designar un paseo en borrico, una actividad que evoca la tradición y el disfrute del campo.
Además, en un sentido más coloquial, se utiliza para describir un disparate o idiotez, resaltando la ligereza o falta de sentido en ciertas acciones o ideas.