De manera figurada, "brillo" se utiliza para describir el esplendor, distinción o excelencia que puede exhibir una persona, su obra o actuación en determinadas circunstancias.
Este uso metafórico implica destacar entre los demás por cualidades o habilidades sobresalientes.
Ejemplos de uso: "Su inteligencia y carisma le añaden un brillo especial a cada reunión".
"El brillo de su talento musical lo ha llevado a ganar numerosos premios internacionales".
Esta acepción hace referencia al acto físico de aplicar técnicas o productos específicos sobre una superficie para hacerla lucir brillante y pulida.
Es un proceso que mejora la apariencia estética de objetos mediante la eliminación de manchas, rayones o cualquier imperfección.
Ejemplos de uso: "Pasé toda la mañana sacando brillo a la cubertería de plata para la cena especial de esta noche".
"Cada fin de semana dedico tiempo a sacar brillo a mis zapatos antes de iniciar la semana laboral".
Origen etimológico de brillo: proviene de brillar, a su vez del italiano brillare 'resplandecer; estallar'.
Segundo diccionario: brillo
Origen de la palabra: (del latín beryllus, berilo, piedra preciosa.)
m. Lustre o resplandor.
fig. Lucimiento, gloria.
—absoluto. Fís. El intrínseco de una fuente luminosa con diferencia del que aparenta. Ver: brillo absoluto2º artículo
Sensación luminosa que un foco produce en la retina. El brillo de objetos como el Sol o una llama depende de la luz que emiten; el producido por objetos como la luna o una pared, de la luz que reflejan. Superficies igualmente iluminadas (v. Iluminación) pueden diferir en brillo, porque las rugosas u oscuras absorben más luz que las pulidas o claras. El brillo se determina por medio de fotómetros, aparatos utilizados también para calcular las exposiciones fotográficas y para medir la iluminación de una superficie. Véase Fotometría.
Unidades.
Una superficie no presenta el mismo brillo en todas las direcciones a menos que sea perfectamente difusora. Por ello se define la luminosidad o brillo fotométrico como equivalente a la intensidad luminosa de una superficie en una dirección dada, dividida entre el área de la proyección de dicha superficie sobre un plano perpendicular a la citada dirección (v. Geometría, Geometría proyectiva); se mide en bujías por unidad de superficie (v. Potencia Luminosa para los términos bujía y lumen). La luminosidad de una superficie perfectamente difusora es la misma en cualquier dirección y se expresa en lúmenes por unidad de superficie: el lambert es una unidad equivalente a un lumen por centímetro cuadrado y es igual a 3,1416 bujías por centímetro cuadrado. En fotometría es norma hablar del brillo de superficies extensas y de la intensidad luminosa de fuentes punctuales, salvo en el caso de las estrellas. Véase Lumen; Lux; Magnitud.3º artículo
Origen de la palabra: conjugación del verbo «brillar», modificándolo así: brillo
(brillo) conju. v. Conjugación del verbo brillar. Se trata de la primera persona del singular (yo brillo) del Presente del Indicativo.